Estimulación de nuestros hijos en casa.
08.02.2021
A continuación os dejamos por aquí una serie de consejos, siempre desde el punto de vista logopédico, para poder estimular a los peques en el desarrollo del lenguaje desde casa. Son unas pequeñas pautas que podemos poner en práctica en el a´mbito familiar para complementar al tratamiento logopédico que se da en la clínica.
- Utiliza gestos que apoyen las palabras; así ayudarás a tu hijo a comprender mejor cuando comience a hablar. Ejemplo: Hacemos el gesto de "comer" cuando el niño le preguntamos "¿Quieres comer? o ¿Qué comes?"
- Ayuda al niño a asociar las palabras con los objetos, figuras y acciones. Ejemplo: ¿Vamos a montar en bici? (señalamos la "bici" mientras enfatizamos dicha palabra).
- Estimula su lenguaje con sus juguetes y cuentos favoritos, haciendo onomatopeyas y "practicando" palabras cortas y fáciles de decir referidas a objetos y situaciones habituales.
- Lee al niño cuentos en voz alta con frecuencia y canta con él sus canciones preferidas.
- Lleva a tu hijo al niño al zoológico, al circo, al mercado, y a otros lugares que sirvan de estímulo. Enséñale qué es cada cosa, señálalo, dile su nombre, etc. Ejemplo: Vamos al zoo y le señalamos el tigre, le decimos su nombre, cómo hace el tigre, etc., además de preguntarle si le gusta, dónde está, etc.
- Motiva al niño para que se interese en la comunicación (el objetivo es que hable, aunque no lo haga bien). Ejemplo: Háblale de temas que le gusten, como puede ser su juguete favorito.
- Describe o narra lo que el niño está haciendo en el mismo momento en el que ocurre. Ejemplo: "Pero bueno, ¿qué bien te pones la chaqueta solito para ir al parque!"
- Cuando hables al niño, intenta situarse frente a él, de forma que él pueda ver tus ojos y tu boca.
- Debes ser un buen modelo del lenguaje, así que intenta hablarle claro y despacio.
- Utiliza un lenguaje sencillo para hablar con el niño. Puede usar frases cortas y palabras y estructuras fáciles de entender para él.
- No insistas en que repita palabras o frases para mejorar la pronunciación.
- Repite enseguida y correctamente lo que tu hijo acaba de decir de forma inadecuada. En estos momentos evita frases como por ejemplo "Así no se dice", "Lo has dicho mal" o "¿Qué dices? No te entiendo"
- Recompensa los esfuerzos lingüísticos del niño. Ejemplo: Pero que bien me has pedido la galleta, ¡Estoy muy orgullosa de ti!
- Amplía las oraciones telegráficas expresadas por el niño agregando la palabra o palabras que faltan mientras se las repite.
- Deja tiempo al niño para que se exprese por sí mismo.
- No permitas que otras personas hablen o contesten en su lugar.
- Respeta los turnos de conversación en la familia.
- Si el niño repite algunas sílabas al empezar las palabras, procura no prestar atención especial, ni hacer comentarios, suprimiendo incluso las ayudas comprensivas de "habla más despacio", "relájate", "tranquilízate", "respira", "vuelve a empezar".