Actividades para estimular a tu peque (5a-6a)
A continuación, exponemos varias actividades para el desarrollo de todas las áreas e hitos del desarrollo entre los 5-6 años, de forma que se pueda realizar una estimulación en casa lo más completa posible con actividades como las siguientes:
Adivinanzas: para esta actividad podemos jugar con el niño con las adivinanzas de siempre, dándoles varias pistas si no las resuelve, o jugar a juegos clásicos como el "Veo- Veo". De esta forma trabajaremos no solo su lenguaje a nivel comprensivo y expresivo sino que también realizaremos una estimulación general de su desarrollo cognitivo.
Caliente y frio: para realizar esta actividad solamente necesitaremos un juguete y varios participantes. Uno de ellos deberá esconder el juguete y el resto encontrarlo. Para ello, el jugador que lo ha escondido deberá ir dando las pistas de "caliente" (cerca del objeto) y "frío" (lejos del objeto). Con esta actividad trabajamos los conceptos de cerca y lejos, la atención, la orientación espacial, la creatividad y la tolerancia a la frustración.
Mi libro: para realizar esta actividad necesitamos cartulinas, lápices, pinturas, rotuladores de colores, fotografías, pegamento, perforadora e hilo de lana de distintos colores. Con ellas nuestros hijos elaborarán el cuento que más les guste (pueden ser de visitas que realizasteis, historias inventadas...) y posteriormente le ayudaremos a encuadernarlo. Nosotros perforaremos las hojas y ellos las unirán con hilos de lana, atados con un nudo en los extremos. Con esta actividad trabajaremos: la concentración, la coordinación óculo-manual, la motricidad fina, la creatividad y el lenguaje.
Pelotas saltarinas: para realizar esta actividad necesitaremos pelotas saltarinas y un cuenco o red. Tiraremos las pelotas por el espacio y los pequeños deberán ir a cazarlas con sus redes. Este juego lo podemos hacer con otros amigos o en familia. Con esta actividad trabajamos: la atención visual y la coordinación óculo-manual con el cuerpo en movimiento.
Texturas: para realizar esta actividad necesitaremos objetos y materiales de diferentes texturas (corcho, pañuelos, papeles, etc.) que ataremos a una acuerda a la altura del niño. El pequeño, con los ojos tapados, deberá ir reconociendo cada uno de los objetos y texturas y explicando la sensación que le transmite cada uno de ellos. Con esta actividad trabajamos: concentración, comunicación y el sentido del tacto.
Punzón: para realizar esta actividad necesitamos un punzón, una plancha de goma, fichas con imágenes que interesen a nuestros pequeños y pinturas de colores. Colocaremos cada una de las fichas encima de la plancha de goma e invitaremos a nuestros pequeños a que la agujeree libremente por los bordes con la intención de que obtenga el dibujo y pueda colorearlo. Con esta actividad trabajaremos: la fuerza motriz, la habilidad para coger adecuadamente los diferentes instrumentos de trabajo, la motricidad fina, la creatividad y el conocimiento y uso de técnicas plásticas y creativas.
Hacer un postre: dejar que nuestros pequeños nos ayuden en la realización de comidas o postres les hará sentir importante, útiles y reforzará los vínculos familiares al trabajar en equipo junto a los miembros de su familia, beneficiando asimismo el desarrollo óptimo de su autoestima. Además, seguirán instrucciones y trabajarán la motricidad fina y gruesa.
Referencias:
Arrianza Mayas, J.C. (2012). Estimulación del lenguaje oral: la guía práctica. Madrid. CEPE
Fodor, E., Morán, M. y Moleres, A. (2016). Todo un mundo de sorpresas. Educar jugando. El niño de 2 a 5 años. Madrid: Pirámide